El 18 de octubre, Lorenzo García, CEO de TheLogicValue participó en una charla organizada por el Proyecto PIM.
Intervienen:
- Lorenzo García Tamarit.
- Beatriz Belando Garín. Directora del Proyecto PIM. Vicedecana de Criminología y Ciencias Políticas de la Facultad de Derecho.
- Mª Emilia Casar Furió. Contratada Dr. de la UPV. Especialidad Derecho de Seguros.
- Belén Andrés Segovia. Investigadora. Programa Atracció de Talent.
- Mónica Arnal Cuadrado. Máster en Derecho Administrativo y la Administración Pública
¿Cómo va a afrontar el sector financiero nuevas normativas como MiFID II?
Los participantes comentaron la vertiginosa evolución del sector en los últimos años. El inversor de a pie puede acceder a gran cantidad de conocimiento de forma relativamente sencilla, y cada vez son más los que prefieren tomar sus propias decisiones.
Tanto la tecnología como la normativa están evolucionando a favor de los pequeños inversores, lo que está dando lugar a un momento muy interesante en el que fintech, bancos, asesores y clientes están redefiniendo sus papeles.
TheLogicValue: Unida a MiFID desde su nacimiento
Lorenzo recordó cuándo decidió embarcarse en la aventura del emprendimiento: con la aparición del iPad vio una oportunidad para compartir con otros profesionales del sector financiero las herramientas que utilizaba en su trabajo como analista. Por esa época también llegaron cambios en la normativa que marcaban un nuevo camino: transparencia, objetividad y trazabilidad.
En este escenario, TheLogicValue ofrece importantes novedades para incrementar la eficiencia de asesores y banqueros privados.
Esta solución integra un potente análisis con funcionalidades que facilitan el cumplimiento normativo. Calcula rentabilidades y volatilidades combinadas de carteras que incluyen fondos y acciones, así como la rentabilidad y volatilidad de cada componente. También es una importante ayuda a la hora de cumplir con la normativa y la presentación periódica de la documentación requerida por la administración, para lo que cuenta con el visto bueno de la CNMV.
Se trata de una herramienta que en ningún momento pretende asesorar por sí misma, sino aportar al profesional toda la información que pueda necesitar para proporcionar a sus clientes un asesoramiento con bases sólidas y ajustado a una nueva normativa.